+ + +
El filósofo Heráclito, de hace veinticinco siglos, nos recordaba que el tiempo fluye como un río que fluye, y como está siempre fluyendo es imposible bañarse dos veces en las mismas aguas suyas. Así el tiempo: imposible vivir dos veces el mismo minuto.
Lo que quedó en entredicho, o por pudor o asepsia preferimos dar por entendido, es que lo que las aguas del río del tiempo se llevan a cada instante es un instante de nuestra vida.
Mmmhhh... Nacemos para morir...
La idea de pretender detener el tiempo tiene que ver con fijar una imagen.
Aunque habría que ver qué entendemos por "fijar" y qué entendemos por "imagen". Y se volvería entonces algo bien metafísico si continuáramos rascándole. Pero como no es la intención, te cuento que:
En mi caso no era río, sino cascada: no horizontal sino vertical: una ducha muy muy caliente una mañana muy muy fría. Y yo: envuelto en los etéreos vapores...
(Y bueno, confieso que de manera irresponsable dejando que el agua se perdiera por la coladera: yo captado en ese pequeño placer un poco escandinavo de contrastar las temperaturas dentro y fuera, o de simplemente estar desnudo bajo la regadera y disfrutarlo...)
Autorretrato bajo la ducha
cae lluvia
duele recordar
me transformo
metamorfoseo
me diluyo cada vez que el tiempo pierdo
el tiempo se escapa por la alcantarilla
no río: ducha
cada nuevo día pierdo el tiempo
con más frecuencia
atado a mis paradigmas
a la invención de mis paradigmas
a la necesidad ficticia de los paradigmas
que me permiten reconocerme en el espejo
espejo que soy yo hace mucho tiempo
había una vez yo y mis posibilidades
quién será éste que soy aquí en el instante de mi muerte
ignoro si todo lo que no fui también soy yo
y si los demás existen
cuál es la prueba fehaciente
la prueba que hace más que la fe
¿que la qué?
creímos en la historia de la humanidad
cuando nos dijeron: había una vez el principio
y la lluvia sigue cayendo
yo bajo la ducha en el instante de morir
quiénes son ello
conservo cicatrices
la prueba fehaciente del amor
o evidencia de carencia
de sentido del humor
llueve todavía
el sentido de la lluvia oxigena mis recuerdos
agregando éter mi vida fue divertida
llueve todavía
atado a mis recuerdos
a la invención de mis recuerdos
a la necesidad ficticia de los recuerdos
que me permiten reconocerme en el espejo
espejo que soy yo aquí ahora
lo que significa en cualquier instante y lugar
qué soy yo dónde después de cuál instante
los recuerdos sólo se miran hacia abajo
como los dedos desnudos de mis pies
junto a la alcantarilla.
+ + +
Kathrin Schmidt
-
*Foto: dpa*
*[…Retomo después de unos *nemontime* o días-muertos-de-fin-de-año que se
prolongaron de más y otras historias que no vienen a cuento: diga...
Hace 9 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario